28 sept 2018
¿Cuántas veces «anónimo» fue una mujer?: las escritoras anónimas o con seudónimos masculinos más célebres
Por: Abril Caminos
El
Lazarillo de Tormes, La epopeya de Gilgamesh, el Cantar de Mío Cid,
el Romancero viejo o la mayoría de la literatura medieval artúrica.
Todos estos libros comparten con otros muchos una misma característica:
desconocemos el nombre de su autor. Han pasado a la historia como «anónimo», pero ¿cuántas veces «anónimo»
fue una mujer?
La más
célebre defensora de esta tesis fue Virginia Woolf, quien en su obra Una
habitación propia afirmaba: «Me
atrevería a aventurar que Anónimo, que tantas obras ha escrito sin firmar, era
a menudo una mujer». Si una de las razones por las que los autores
ocultaban su identidad era el miedo a enfrentarse a prejuicios o a no ser
tomados en serio, resulta verosímil pensar que las mujeres lo tenían más
complicado en épocas pasadas que los hombres.
Las anónimas que
conocemos
Hay
varias obras literarias, algunas de ellas muy conocidas, en las que sabemos que
«Anónimo» era una mujer. Y las
razones para permanecer en el anonimato son variadas. En algunos casos, se
trata de manuscritos encontrados y publicados tras la muerte de sus autoras y
cuyos editores deciden respetar su intimidad.
Es el
caso de Una mujer en Berlín, el estremecedor relato de los últimos días de
la Segunda Guerra Mundial y los primeros de la entrada del Ejército Rojo en la
ciudad. Se publicó de forma anónima
por respeto a la privacidad de una mujer que cuenta en primera persona las
violaciones sufridas por parte de los soldados rusos. Hoy se sabe que su autora
se llamaba Marta Hillers.
También ocurre con cierta frecuencia en la
literatura erótica, como en La pasión de Mademoiselle S, una
recopilación de cartas encontradas de forma casual y escritas en los años
veinte en Francia. No habría sido difícil averiguar su identidad (se puede
deducir incluso de la lectura), pero se publicó como anónima por respeto a la
intimidad de la autora.
Pregúntale
a Alicia, el diario de una adolescente en los años setenta, se ha convertido en
un long-seller a lo largo de los años y, a pesar de que se presentó
originalmente como un diario verdadero, las dudas sobre su autenticidad han
hecho que desde los años ochenta se catalogue como obra de ficción. Lo que sí
se ha mantenido es su carácter anónimo, a pesar de que es conocido que su autora es Beatrice
Sparks.
Uno de
los casos de anonimato desvelado más conocidos de la historia es el de Jane Austen, que publicó en 1861 Sentido y
sensibilidad con la autoría de «by
a Lady» (por una mujer). Se trataría de un caso a medio camino entre
el anonimato y el reconocimiento explícito de la autoría femenina.
Mujeres
que se hacen pasar por hombres
Además
de la anonimia, otro método por el que la autoría femenina ha pasado
desapercibida es el uso de
seudónimos masculinos para la publicación. Las hermanas Brontë (Charlotte, Emily y Anne) escribieron sus
primeras obras, incluida la mítica Cumbres borrascosas, bajo los seudónimos de Currer, Ellis y Acton Bell,
para evitar los prejuicios de la época sobre la narrativa femenina.
Portada original de «Cumbres borrascosas», firmado por Ellis
Bell
También Louisa May Alcott, autora de Mujercitas, escribió
otras de sus obras con el ambiguo seudónimo A.M. Barnard. Pero ella, como ocurrió con las Brontë, ha recibido
el reconocimiento posterior a su verdadera identidad. No es ese el caso
de George Sand o George Eliot, que han pasado a la
historia de la literatura por sus seudónimos masculinos, e incluso muchos
lectores siguen acercándose a su obra desconociendo que fueron mujeres.
La escritora George Sand
Una
novela muy conocida del siglo XX, gracias en parte a la película basada en
ella, fue Memorias de África, obra de Isak
Dinesen. Aunque Isak Dinesen, en realidad, no era más que el seudónimo de
la baronesa Karen von Blixen-Finecke,
protagonista del libro. Se ha especulado mucho sobre las razones por las que eligió un seudónimo masculino,
pero la teoría más aceptada es que fue para ocultar en la medida de lo posible
el carácter autobiográfico de la novela.
Un caso
especialmente curioso es el de la escritora francesa Colette, quien alcanzó el éxito a comienzos del siglo
XX con la serie de novelas Claudine... claro que no se publicaron a
su nombre. Fue su marido, Henry
Gauthier-Villars, apodado «Willy», quien suplantó
su autoría, y tuvieron que pasar décadas antes de que ella tuviera el
reconocimiento merecido.
La escritora francesa Colette
La
literatura española no es tampoco ajena a este fenómeno. El ejemplo más
conocido es el de Fernán Caballero,
que en realidad era Cecilia Böhl de Faber.
Escribió diferentes novelas de carácter costumbrista e ideología
conservadora, entre las que destaca La gaviota (1849). Tomó su nombre
de una localidad de la provincia de Ciudad Real, pero lo hizo para evitar que se identificara su autoría femenina:
«[...] trocando para el público, modestas faldas de Cecilia por los castizos
calzones de Fernán Caballero».
Pero el
uso de seudónimos masculinos por parte de mujeres no es algo que nos remita
solo a épocas pasadas. La autora más vendida de las últimas décadas, J.K. Rowling, autora de Harry Potter, se vio obligada
por sus primeros editores a utilizar sus iniciales, en lugar de su verdadero
nombre, Joanne. ¿La razón? Que el manuscrito
de Harry Potter parecía estar dirigido principalmente a lectores
jóvenes y masculinos, que podrían tener prejuicios a la hora de leer una obra
de ese estilo escrita por una mujer. Eran finales de los años noventa.
Pero la
propia Rowling tomó también la decisión
de escribir con seudónimo masculino para sus novelas policíacas de
la serie Cormoran Strike. Su intención fue desmarcarse lo máximo posible
del universo Harry Potter y que su autoría no eclipsase a las novelas
en sí (aunque poco tardó en saberse que ella era la autora), pero eso no evitó
que recibiera críticas por masculinizar su
obra, cuando en su caso no era necesario, como sí lo había sido para muchas autoras a lo
largo de la historia de la literatura.
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Fuente bibliográfica
CAMINOS, ABRIL, [sin fecha]. ¿Cuántas veces «anónimo» fue una mujer?: las escritoras anónimas o con seudónimos masculinos más célebres. [en línea]. [Consulta: 28 septiembre 2018]. Disponible en: https://www.trendencias.com/libros-y-literatura/cuantas-veces-anonimo-fue-mujer-escritoras-anonimas-seudonimos-masculinos-celebres.
5 extravagantes trucos para encontrar el trabajo de tus sueños
Por: Alicia Ruiz Fernández
Todos queremos encontrar un trabajo que nos haga felices, que nos permita desarrollar nuestras principales habilidades. Pero la búsqueda de trabajo no es una tarea fácil, muchas veces no sabemos qué es lo que hacemos mal. Estos trucos te abrirán el camino hacia tu empleo soñado.
Si estás buscando empleo, ya sea porque el tuyo no te gustaba, porque te han despedido o porque quieres implicarte en nuevos proyectos, esto te interesa.
Normalmente nos ponemos a mandar nuestro currículum vía online a muchas empresas, pero hay otras formas más inusuales de conseguir el empleo con el que tanto sueñas.
Lo primero es aprender a buscar trabajo de una manera eficaz, ya que según Marya Triandafellos, consultora de negocios y autora de ‘CareerX: Asesoramiento de expertos sobre cómo cultivar su carrera ‘, vamos a pasarnos entre uno y tres años de nuestra carrera buscando trabajo.
5 consejos clave para millennials que buscan empleo
La mayoría de las personas tendemos a buscar empleo de la manera más habitual que existe, es decir, aplicando en procesos online, asistiendo a ferias de empleo, participando en eventos de networking, etc. Pero esta búsqueda puede que no sea la más acertada. Por eso vamos a contarte algunos trucos no convencionales para encontrar el empleo de tus sueños:
1. Consigue el trabajo antes de que lo publiquen
Así es, esto es posible. La mayoría los puestos de trabajo no se cubren a través de las bolsas de trabajo que publican sus anuncios de empleo. Por el contrario, tan solo el 15% de los empleos se obtienen por medio de publicaciones, es decir, la mayoría se llenan de forma interna o por buenas referencias.
Por tanto, intenta conseguir ese empleo antes de que lo publiquen en una plataforma o bolsa de empleo, cita a tus conexiones y pregunta a tus compañeros sobre su empresa, si hay algún empleado que vaya a irse, si va a haber una reorganización de la empresa, etc.
2. Recopila información
Si ya tienes una empresa en mente y tu sueño es trabajar en ella, intenta recopilar toda la información que puedas, escribe a compañeros que trabajen allí o que son antiguos alumnos, infórmate sobre la compañía y su competencia, síguela en las redes sociales y conoce su página web.
Tendrás más posibilidades de éxito cuanta más gente conozcas en la empresa y más alto sea su cargo.
3. Crea un evento y establece relaciones
Puedes invitar a varios amigos a tomar un café o una cerveza. Diles a tus compañeros que traigan un invitado al evento, y cuando estéis todos reunidos, explica tu meta de encontrar ese trabajo que tanto te interesa.
Seguro que alguno puede ayudarte, aconsejarte, o conoce a alguien que se encuentra en tu misma situación y con el que puedas apoyarte.
4. Hazte voluntario
Puedes ser voluntario en una organización sin fines de lucro que te guste, así, haciendo lo que te gusta sin cobrar nada podrás conocer personas que tengan tus mismos ideales y que, a lo mejor, están buscando a alguien para cubrir un empleo similar al que tú quieres.
Así que haz lo que te gusta mientras ayudas a otros y tu trabajo perfecto estará más cerca de ti.
5. Demuestra tu experiencia en redes sociales
Tu experiencia es muy importante para una empresa de cara al proceso de contratación. Por eso, lo mejor es que crees una demostración de tu experiencia en las redes sociales y los blogs.
Así las empresas sabrán a quién están contratando y qué es lo que pueden esperar de ti.
Estos trucos no son los más habituales para conseguir trabajo, pero son extremadamente útiles ya que hacen incapié en las cosas distintas que puedes aportar en la empresa de tus sueños. Ahora solo te falta ponerlas en práctica, e ir tras el empleo de tus sueños.
Vía | NBC News
Fuente bibliográfica
RUIZ FERNÁNDEZ, ALICIA, [sin fecha]. 5 extravagantes trucos para encontrar el trabajo de tus sueños. [en línea]. [Consulta: 28 septiembre 2018]. Disponible en: http://www.ticbeat.com/empresa-b2b/como-encontrar-el-trabajo-de-tus-suenos-gracias-a-estos-extravagantes-trucos/.
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¿Libro mojado? Este truco es perfecto para dejarlo como nuevo
* Incluso cuando lo dejamos secar al natural, el papel queda
arrugado.
*
Esa forma queda así para siempre, como si fuera una cicatriz.
*
Los líquidos son la Kryptonita de los documentos impresos.
·
A veces, por accidente o por simple
torpeza, puede derramarse la taza de café o vaso de agua que justo estaba al
lado de un buen libro. Las páginas se pegan y quedan agrupadas, pero incluso
cuando finalmente se ha secado, el papel queda arrugado. Todo ello por no
hablar de que esa forma queda así para siempre, como una cicatriz.
·
Afortunadamente, existe una manera de
dejarlo como nuevo siguiendo estos sencillos pasos de mano de
la Biblioteca Nacional de la Dieta de Japón. Dado que los líquidos
son la Kryptonita de los documentos impresos -que sin duda también tienen un
pequeño problema con el fuego-, hoy hablaremos de un truco perfecto para secar
adecuadamente un libro mojado.
·
Tal y como explican en la página web de la
Biblioteca Nacional de la Dieta, el procedimiento no requiere ningún
instrumento que no tengas en casa. Esencialmente necesitarás una toalla de
material absorbente, rollo de papel, ventilador eléctrico o secador de pelo,
una superficie dura y plana, pisapapeles o algo similarmente pequeño y pesado.
·
Una vez tengas todos estos materiales a
mano, debes empezar por presionar la toalla sobre las partes más húmedas del
libro. Inicialmente, de este modo la bayeta estará absorbiendo la mayor
cantidad de líquido derramado sobre las páginas. A continuación se coloca papel
entre las páginas del libro que aún están húmedas, teniendo sumo cuidado de no
romper las páginas o deformar la forma.
·
En caso de que la cubierta sea lo
suficientemente rígida como para quedarse de pie, coloca el libro en vertical,
con la parte mojada en la parte superior. Si la tapa es blanda, debes dejar el
libro sobre una superficie plana. Después, enciende el ventilador o secador y
apunta al libro en cuestión. Asegúrate de que el flujo de aire sea frío, no
caliente.
·
A medida que el papel entre las páginas
absorbe la humedad, se aconseja reemplazarlas periódicamente hasta que lo
mojado ya no esté frío al tacto. Una vez que esto sucede, retira el papel y
coloca el libro sobre una superficie dura y plana para terminar de secarlo.
·
En este punto se recomienda aplicar mucho
peso: pon encima un pisapapeles o tablero que cubra la superficie del libro. Si
lo has dejado así más de un día, retira al menos una vez cada 24 horas y revisa
las páginas para tener la certeza de que no se peguen entre sí.
Fuente bibliográfica
¿Libro mojado? Este truco es perfecto para dejarlo como nuevo - EcoDiario.es. [en línea], [sin fecha]. [Consulta: 28 septiembre 2018]. Disponible en: https://ecodiario.eleconomista.es/viralplus/noticias/9399453/09/18/Libro-mojado-Este-truco-es-perfecto-para-dejarlo-como-nuevo.html.
17 sept 2018
¿A dónde van los libros que no venden?: entre la guillotina, el saldo y los regalos
Por: Silvina Premat
¿A dónde van los libros que no venden?:
entre la guillotina, el saldo y los regalos
"Recibí
un mail de la editorial informándome que tenían 1500 ejemplares en un estado en
el que no se podían vender. Me comunicaban que iban a destruirlos y me ofrecían
que, si quería algunos, podía retirarlos del depósito. Fue un shock porque
creía que el libro se vendía muy bien". La anécdota es de Laura
Ramos en referencia a Corazones en llamas, la reedición de
su libro en coautoría con Cynthia Lejbowicz, pero evoca una situación por la que
atraviesan muchos autores en virtud de un hecho poco difundido y sobre lo que
algunos prefieren no hablar: la guillotina como destino final de los libros.
Una
práctica común en las grandes editoriales del mundo, y también en nuestro país,
la destrucción de libros es impulsada no
ya por razones ideológicas como en los regímenes autoritarios, sino por la
dinámica del mercado editorial. La necesidad de hacer lugar en los
depósitos, propios o alquilados, en los que se almacenan los ejemplares no
vendidos y reducir los costos pone en marcha todos los años para esta fecha, en
previsión del cierre de los balances, un procedimiento similar en las
diferentes empresas.
"Antes de llegar a esa instancia se evalúan
donaciones, venta interna en la editorial y venta al autor", cuenta
a LA NACION la gerenta de Marketing y Comunicación de Penguin Random
House, Valeria Fernández Naya, quien para hablar de la eliminación de libros
recurre a un eufemismo. "No se
destruyen, se reciclan y se utilizan para otros libros", afirma e
insiste en que la destrucción "es
el último recurso" y en que en siete años de trabajo supo solo de tres
libros que fueron al picadero de papel. Agrega que "es un tema muy
delicado porque según cómo se aborde" puede generar conflictos "por
lo que representa en la Argentina la destrucción de libros". Tal
precaución lleva a la multinacional con la que PRH comparte la representación
de la mitad del mercado editorial argentino, el Grupo Planeta, a no atender a
la prensa. "No se podrán brindar los datos requeridos ya que es
información confidencial de la empresa a nivel global", fue la respuesta
de ese grupo editorial a la solicitud de LA NACION. No obstante, se sabe
que también Planeta destina a la guillotina buena parte de los ejemplares que
tienen al menos dos años de publicación y son devueltos por las librerías por
falta de venta o por estar fallados.
La
eliminación de libros llegó al país con el crecimiento de la industria y de la
mano de los grupos empresariales que hoy tienen una treintena de sellos y que
publican un promedio de 40 nuevos títulos cada mes -entre 500 y 700 por año-
con tiradas de entre 2000 y 50.000 ejemplares o más. Errores en los cálculos de
ventas al decidir la tirada o imponderables del mercado se traducen en cientos
de miles, y hasta millones, de ejemplares que se van acumulando en los
depósitos.
La falta
de información precisa alimenta mitos que no llegan a desmentirse.
"Cuando
fui a buscar algunos ejemplares estaba compungido por lo que percibía como un
cierto fracaso. Un empleado de la editorial que me ayudó a llevarlos hasta el
auto intentó consolarme; me dijo que estaba contactando a otros escritores por
lo mismo y que me quedara tranquilo que
no serían como los nazis que destruían libros, sino que ellos los reciclaban y
con eso hacían maples para huevos...", comenta otro autor
que, por la seriedad de su interlocutor, se fue convencido de haber salvado al
menos dos centenares de libros de esa suerte.
Fernando
Fagnani, editor de Edhasa que, por política editorial, no destruye ni salda
libros, llama a "desacralizar la
cuestión". Considera que "es
importante dejar de ver al que destruye un libro como un delincuente porque eso
es un disparate”. Publicar 500 novedades en un año es muy meritorio y tener
que destruir algunos es un efecto colateral y una práctica legítima. Me parece
que hay un purismo con los libros que lo entiendo como lector, pero desde el
lado de la editorial es totalmente lógico. “Hacer un culto por el libro en sí no tiene mucho sentido".
Como
otras editoriales medianas o pequeñas, Edhasa publica un promedio anual de
treinta títulos y con tiradas de entre 1500 y 3000 ejemplares. "Son
apuestas editoriales diferentes. Los más grandes apuestan por el público y si
el lector no está tienen que hacer algo porque no pueden tener en el balance y
en los depósitos cientos de miles de ejemplares, que son un costo importante,
en honor a nada porque se sabe que la ruleta no vuelve a pasar por ahí",
explica Fagnani al referirse a libros que "difícilmente tengan una sobrevida" porque, por ejemplo, tratan
temas coyunturales. "Cuando la apuesta es más a la literatura o los
ensayos no se acumula tanto stock y los riesgos son menores. Puede pasar que
apostás por autores que a lo mejor no venden mucho en el primer libro, sino con
el segundo o tercero unos años después", continúa Fagnani, para quien
"las gestiones chicas son más intensivas, con pocos libros publicados;
aunque esto no quiere decir que salga bien".
María
Teresa Carbano, directora de la editorial Imaginador, agrega otro factor.
"Hay una flexibilidad que tiene la pequeña que no la tiene la grande.
Hasta ahora, no sé qué pasará con los cambios del dólar, muchas editoriales
chicas venían imprimiendo bajo demanda tiradas, por ejemplo, de 300 ejemplares.
No tendemos a destruir; nos cuesta tomar
esa decisión y hacemos una oferta especial, buscamos exportar o saldar".
En este contexto, la opción de abaratar los precios y ofrecerlos a los
"salderos" o librerías "de viejo" es elegida por algunos
sellos y escritores y rechazada por otros que incluyen en los contratos la
prohibición de "saldar" los ejemplares no vendidos para no poner en
evidencia lo que entienden como un fracaso personal.
"No
hay nada vergonzoso en que los ejemplares de una tirada común vayan a una
librería de saldos. El comprador de saldos no necesariamente lleva novedades, y
viceversa. Son segmentos distintos. Yo me crié leyendo libros de saldos de la
calle Corrientes", dice Daniel Guebel, otro de los escritores que
"salvó" de la guillotina dos de sus libros, La carne de
Evita y Ella. "Con la publicación de nuevos libros la vida útil
de un título se agota mas rápido; si se venden poco, no significa que mis
libros son peores que otros. Es una cuestión de mercado", dice el escritor
y cuenta que se hizo cargo de los ejemplares que le dio la editorial, donó
algunos a Filba, que a su vez los dieron a bibliotecas y al resto lo está
obsequiando a los clientes de Tanizaki, su restaurante de sushi en Palermo.
"Con la cuenta, el mozo les lleva
un ejemplar de regalo. Tenemos la idea de hacer lo mismo con libros de
otros autores que estén en la misma situación".
Laura
Ramos también encontró una forma de regalar los ejemplares de Corazones en
llamas, cuya primera edición en los años 80 había vendido 50.000 ejemplares. Los ofreció a través de su muro de Facebook
y a las pocas horas tenía más de mil pedidos. Había pensado responder uno a
uno, pero fueron tantos que directamente puso la dirección donde debían
retirarse, la del periódico Mundo Villa, cuyos directivos habían
aceptado su propuesta de distribuirlos gratis en las barriadas donde circula
esa publicación. "Se repartieron unos 600 ejemplares. Me quedé con la idea
de que la gente interesada en Corazones en llamas no se había
enterado de la reedición, porque los mensajes eran de sorpresa en
general", admite la escritora. Y suma: "El shock que provoca en un autor el hecho de que se destruyan sus
libros es tan poderoso que no se suele quedar con energía para convertir esa
tristeza en acción. Es demoledor y vergonzante, pero a mí me dio mucho
entusiasmo poder obsequiarlos".
También
a las redes sociales recurrió Germán Beder para ofrecer La vez que casi me
muero y otros relatos y en una hora y media "volaron" doscientos
libros. "Lo hice creyendo que no iba a tener ningún tipo de repercusión.
Lo que pasó marca que la gente sigue leyendo, pero que los libros son muy caros
y supongo también que, en este escenario del país, lo gratuito llama más la
atención. De otra forma es inexplicable tanto interés", bromea Beder, para
quien la destrucción "es una situación un poco traumática". Al momento
de recibir la comunicación de la editorial se sintió disgustado y dolido.
"Después recapacité y valoré que me hayan regalado los libros antes de
tirarlos", recuerda.
Donar no siempre es fácil
¿Por qué
no los regalan las mismas editoriales? Las donaciones a instituciones no están
incluidas como política permanente de los grandes grupos aunque hagan algunas
en ocasiones especiales. Planeta, por ejemplo, donó ejemplares para el último
Festival BAN y en una acción conjunta con Disney, por los 90 años de Mickey, al
Hospital Durand. PRH suele regalar libros al Hospital Garrahan y a la Fundación
Leer. "Hay libros que no te queda otra porque no se pueden rescatar,
pueden estar deteriorados, rotos, con humedad, amarillos o picados por
insectos. Y otros que, por la temática que tratan, tampoco se pueden donar como
los de contenido erótico, por ejemplo", dijo Fernández Haya.
Edhasa
acostumbra enviar a bibliotecas y cárceles ejemplares con la tapa rota u hoja
doblada, e Imaginador, como otros sellos pequeños, dona a la Fundación El Libro
y a las cámaras del Libro y de Publicaciones y estas los distribuyen.
¿Y las
bibliotecas? "La Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) no
acepta donaciones de las editoriales, salvo alguna que otra excepción, porque las
bibliotecas son asociaciones civiles independientes que manejan su dinámica
bibliográfica como se les da la gana. No podemos aceptar una donación y
mandársela a una biblioteca porque esta puede quererla o no y porque tampoco
tenemos recursos para enviarlas al interior", dijo a LA
NACION Leandro De Sagastizábal, titular de la Conabip. Para evidenciar la
diversidad de intereses de las bibliotecas recordó que en la última edición de
la Feria del Libro, 1054 bibliotecas populares de todo el país compraron 37.000
títulos distintos. Y agregó: "Por otro lado, no queremos llenar las
bibliotecas de los rezagos buenos o malos de gente que decide mudarse y le
sobró la mitad de libros, o las editoriales que en vez de destruir lo quieren
mandar a la biblioteca; queremos la biblioteca llena de los mejores libros, los
nuevos, los que atraen lectores". No obstante, De Sagastizábal aclaró que
la destrucción, con la que él personalmente no está de acuerdo
"nunca", muchas veces "no tiene que ver con la calidad del
material sino con un error en la tirada inicial" o con ciclos económicos
complejos, y que las editoriales o los autores se contactan directamente con
las bibliotecas.
Donde
reciben gustosos algunas donaciones es en la Fundación Leer, a la que llegan
pedidos de libros desde escuelas y bibliotecas del interior.
"Tenemos
una fluida relación con las editoriales porque saben que las donaciones que
hacen llegan a destinatarios que los necesitan, pero somos muy cuidadosos del
tipo de libros que aceptamos", comparte Patricia Mejalelaty, su
presidenta. En cada reunión que ella mantiene con editores repite un mismo
pedido: que la posibilidad de donar a instituciones los ejemplares que no
logran un canal de venta efectivo sea establecida por una cláusula de los
contratos con los autores. "Esto facilitaría las cosas y evitaría que las
donaciones sean acciones esporádicas", augura.
PREMAT, SILVINA, 2018. ¿A dónde van los libros que no venden?: entre la guillotina, el saldo y los regalos. [en línea]. [Consulta: 18 septiembre 2018]. Disponible en: https://www.lanacion.com.ar/2172443-a-donde-van-libros-no-venden-entre.
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15 sept 2018
8 maneras de aumentar tu poder mental
¿Alguna
vez sentiste que te falla demasiado la memoria?
¿Alguna vez estuviste en una situación en
la que estabas tratando de recordar desesperadamente el nombre de alguien o un
lugar pero no había manera?
Suelen
decirnos que nuestra memoria empieza
a fallar con la edad, así como otras funciones cognitivas, como el
razonamiento.
Pero hay
esperanza: el cerebro se puede reconfigurar.
* ¿Cuándo la mala memoria es un problema?
Claves para saber qué es normal y qué no
* El método para mejorar la memoria que no
requiere ningún esfuerzo
Si
quieres aumentar tu poder cerebral, prepárate para un entrenamiento mental con
estos consejos y técnicas de la serie de la BBC "Cómo tener un mejor cerebro".
1. Haz
ejercicio
Es
verdad: nuestro cerebro crece a medida que practicamos ejercicio.
Saltar
las recomendaciones
El
ejercicio aumenta la sinapsis, crea más conexiones en el cerebro y ayuda a que
se formen células extra.
El
ejercicio tiene beneficios para tu cuerpo y tu mente.
Tener
mejor salud cardiovascular también significa que llevas más oxígeno y eliminas
toxinas.
Y si
haces ejercicio al aire libre, mucho mejor. Tendrás el beneficio añadido
de absorber más vitamina D.
Consejo: haz ejercicio mientras exploras un nuevo ambiente, una
nueva forma de hacer cosas o compartir ideas con otra gente; de esta forma
ayudarás a que las nuevas células formen un circuito.
Por
ejemplo, si te gusta la horticultura, prueba a hacerlo en un huerto alquilado
para que puedas hacer amigos mientras practicas, o únete a un grupo que tenga
las mismas aficiones que tú en lugar de hacerlo solo.
Simplemente
asegúrate de que lo pasas bien:
el deseo de compartir es lo que ayuda a impulsar los efectos del ejercicio y la
interacción social en el cerebro.
2.
Memoriza en movimiento
Esta es
una técnica respaldada por investigaciones y reconocida ampliamente por
actores.
Si
tratas de memorizar palabras e
intentar aprender algo mientras te mueves, es más probable que la información
se te quede.
La horticultura
es buena para tu cuerpo y tu mente: haces ejercicio, tienes tiempo de pensar y
... ¡puedes hacerlo con otras personas!
Consejo: la próxima vez que tengas una presentación o un discurso
que aprenderte, ¿por qué no pruebas a pasear mientras lo lees o incluso bailar
para ayudar a tu cerebro a memorizarlo?
3. Come
los alimentos adecuados
Alrededor
del 20% de la ingesta de azúcar y de energía de tu cuerpo va directamente al
cerebro, lo que provoca que la función cerebral dependa de los niveles de glucosa.
Si tus
niveles de azúcar no están controlados, tu mente puede sentirse mucho más
confusa. Comer alimentos que te gustan libera la dopamina química en el sistema
de recompensa del cerebro, por eso sientes placer cuando los comes.
Pero
además de alimentar las áreas de recompensa del cerebro, también tienes que alimentar tu panza.
Una
panza saludable significa una mente saludable.
Hay
alrededor de 100 billones de microbios en el sistema digestivo humano,
interconectado con tu cerebro mediante el llamado eje cerebro-intestino, y el
equilibro de esos microbios es crucial para el bienestar del cerebro.
De
hecho, la barriga es normalmente llamada "el segundo cerebro". Una dieta saludable y variada ayuda a
mantener esos microbios a un nivel adecuado y el cerebro saludable.
Consejo: las células cerebrales están formadas de
grasas, así que es importante no
eliminar la grasa de tu dieta. Ácidos grasos básicos de nueces, semillas,
aguacates o pescado son buenos para el cerebro, junto al romero o la cúrcuma.
Y trata
de disfrutar tus comidas junto a otros siempre que puedas: socializar afianza
los efectos positivos de una dieta buena y saludable para tu cerebro.
4.
Desconecta y escápate
Tener
algo de estrés siempre es necesario porque nos ayuda a responder rápidamente en
caso de emergencia: ayuda a producir cortisol, una hormona que nos hace tener
energía en un breve lapso de tiempo y nos ayuda a centrarnos.
Pero la ansiedad prolongada y altos niveles de
estrés incómodo son bastante
tóxicos para el cerebro.
Por eso
es clave que aprendamos a desconectar de vez en cuando, para permitir a esa
parte del cerebro que descanse.
Al
desconectar, de hecho, estás ejercitando una diferente parte del cerebro.
Tu mente
necesita relajarse para llevar a cabo determinadas funciones.
Tenemos
una red particular en el cerebro que es la red neuronal por defecto: es la
parte que nos permite fantasear (o
soñar despierto) y es importante para mantener la memoria.
Al
desconectar de nuestro mundo, estamos activando esa parte del cerebro y
permitiéndole que haga su trabajo.
Así que,
la próxima vez que te pillen fantaseando en el trabajo, solo tienes que
explicar que estabas ejercitando una parte crucial de tu cerebro.
Consejo: si te resulta muy difícil relajarte y
desconectar, por qué no tratas algunas técnicas
de relajación como la meditación que puede ayudar a que los hormonas
del estrés vuelvan a niveles más prácticos.
5. Busca
nuevos desafíos
Una
buena manera de potenciar tu cerebro es desafiarle...
aprender algo nuevo.
Aprende
algo nuevo y ayuda a tu cerebro.
Actividades
como participar en una clase de arte o aprender un nuevo idioma aumenta la
elasticidad de tu cerebro.
Consejo: prueba
un juego online con tus amigos o familia.
No solo
supondrá un desafío para ti; competir contra otros significa una mayor
interacción social y el estímulo de un nuevo desafío mientras interactúas
socialmente ayuda al cerebro.
6. ¡Sube
la música!
La música estimula el cerebro de una manera única.
Cuando
miras las imágenes cerebrales de alguien escuchando música o tocando algún
instrumento, se ve claramente que todas las partes del órgano están activas.
La
música estimula el cerebro.
La
música puede reforzar la cognición general y la memoria musical, por ejemplo,
es la última en desaparecer en casos de demencia.
Consejo: únete a un coro o compra entradas para ver
a tu grupo favorito.
7.
Estudia... y duerme
Si
estudias algo nuevo durante el día, se forma una conexión en tu cerebro entre
una célula nerviosa y otra.
Cuando
duermes, esa conexión se afianza y lo que has aprendido se convierte en una memoria.
Por eso el sueño es un factor muy importante para
la memoria.
Estudia
mucho... y duerme.
Si le
das a alguien una lista a memorizar antes de dormir, la recordará aún más a la
mañana siguiente que si se la das a primera hora de la mañana y le pides que la
reciten a final del día.
Consejo: si estás repasando para un examen, prueba a
repasar las respuestas en tu cabeza mientras te vas a dormir.
Y si has
experimentado un evento traumático o tienes un recuerdo malo sobre algo, trata
de no darle vueltas justo antes de irte a dormir porque eso puede reforzar ese
recuerdo y aumentar las emociones negativas vinculadas al mismo.
Por la
misma razón, ¡evita las películas o
historias de miedo antes de dormir! En su lugar, trata de pensar en
cosas positivas que has aprendido o experimentado durante el día y ayuda a tu
cerebro a que se agarre a ellas.
8.
Levántate bien
Todos
sabemos que el sueño es importante: si duermes menos de cinco horas, no estás
tan alerta mentalmente, mientras que si sumas más de 10 horas puedes sentir un
poco de jetlag.
Pero la
clave para ayudarte a que estés a tu mejor nivel mental durante el día es cómo te levantas.
Idealmente,
debes dormir en una habitación a oscuras y levantarte con luz que vaya
intensificándose gradualmente... como el amanecer.
Despiértate
con una luz gradualmente más intensa y tendrás una mejor respuesta del cerebro.
Esta luz
penetra a través de los párpados cerrados y prepara al cerebro para que
tengamos una mejor respuesta al despertar del cortisol.
La
cantidad de esta hormona en tu cuerpo cuando te levantas determina cómo de bien
trabajará tu cerebro durante el día.
Consejo: compra una alarma con un sistema de luces
que simule el amanecer, que te ayude a despertarte de manera natural.
Eso sí,
para aquellos que duermen profundamente, ¡asegúrense de que incorpore también
sonido!
Fuente bibliográfica
REDACCIÓN, 2018. 8 maneras de aumentar tu poder mental. BBC News Mundo [en línea]. 27 agosto 2018. [Consulta: 16 septiembre 2018]. Disponible en: https://www.bbc.com/mundo/noticias-45301669.
11 sept 2018
Lenguaje inclusivo: ¿un nuevo género o moda pasajera?
Por: Lucía Benegas
La
aparición de un grupo de adolescentes del Pellegrini hablando por televisión y
reemplazando por “e” los masculinos genéricos encendió la discusión en torno al
lenguaje inclusivo. Negativas de la RAE, lingüistas a favor y en contra se
cruzaron en redes sociales y medios de comunicación. ¿Estamos ante el
nacimiento de un nuevo género? ¿Se puede pretender la evolución del lenguaje
por decreto o imposición?
Buscando
la inclusión. Primero reemplazamos el masculino genérico por las formas
femenina y masculina; después, se optó por l a “ x ” y e l @. Hoy, l a “ e ” se
presenta como la nueva alternativa, pronunciable y neutral.
"Hay poques
diputades que están indecises. Queremos demostrarles que a nosotres
no nos va a pasar por al lado que decidan que sigan muriendo mujeres",
dijo la vicepresidente del centro de estudiantes del colegio Pellegrini a un
notero en un móvil de TN.
Faltaban
horas para la votación de la ley del aborto en la Cámara de Diputados y los
pañuelos verdes invadían uno de los secundarios universitarios más prestigiosos
del país, que había sido tomado por un grupo
de estudiantes en apoyo a la despenalización.
En ese
contexto, la estudiante salió a defender la decisión y eligió hacerlo haciendo
uso de una nueva modalidad: el
leguaje inclusivo que remplaza las "o" de los masculinos genéricos
por la "e", una vocal neutra que no se identifica con ningún
género y –a diferencia de la "x" o el @– puede trasladarse
al habla sin inconvenientes.
El
debate por el lenguaje inclusivo ganó territorio con explicaciones y posturas
enfrentadas.
¿LENGUAJE QUE REFLEJA O CONSTRUYE?
"Creo
que es conveniente tomar lo que sucede con el lenguaje como síntoma de una demanda que excede a la lengua",
dice el ensayista, poeta, traductor, filósofo y miembro correspondiente de la
Real Academia Española, Santiago Kovadloff, y completa: "La cuestión central es la demanda que se
lleva adelante mediante estas propuestas experimentales. Esa demanda no es
otra que la de ser considerados como iguales, la de ser estimados como pares
por parte de quienes se sienten excluidos", explica.
Para
Kovadloff, la lógica de apelar al masculino en referencia a los grupos mixtos
tuvo que ver con que durante años, muchos de los ámbitos profesionales o
relacionados con la vida pública eran casi exclusivamente de ese género.
Modificada esa realidad y sumergidos en un contexto en el que las mujeres
habitan la mayoría de los ámbitos, el cuestionamiento
de la regla le parece válido y razonable, independientemente de sus
posibilidades de éxito.
“La
cuestión central es la demanda que se lleva adelante mediante estas propuestas
experimentales. Esa demanda no es otra que la de ser considerados como iguales,
la de ser estimados como pares por parte de quienes se sienten excluidos”,
explica Santiago Kovadloff.
En la
misma línea, la profesora de la Univeridad Torcuato Di Tella y doctora en
Lenguas y Literaturas Romances de la Universidad de Harvard, Karina
Galperín, prefiere evitar interpretaciones ideológicas al analizar el fenómeno:
"Estamos en dos ámbitos dinámicos que son la realidad y la lengua, y en
esto, la lengua necesita responder
a una realidad que ya cambió. Para mí, esto no es ideológico: si sólo fuera
una cuestión reivindicatoria, nunca hubiera llegado a donde llegó", dice
Galperín.
Lejos de
las posturas más reaccionarias de las instituciones como la Real Academia
Española, para Galperín, la
modificación de la lengua nos acercaría a un lenguaje más preciso y adecuado.
"El uso de la letra «e» como supuesta marca
de género es ajeno al sistema morfológico del español, además de ser
innecesario, pues el masculino gramatical funciona como término inclusivo en
referencia a colectivos mixtos o en contextos genéricos o
inespecíficos", es la respuesta con
la que la RAE se refiere al tema en todas las consultas a través de
las redes sociales.
NECESIDAD O CAPRICHO.
"La
discusión del lenguaje inclusivo no es algo nuevo: hace más de veinte años que la UNESCO sugirió que se hablase de niños y
niñas en vez de apelar al masculino genérico, algo que desde entonces
llegó incluso a cuestionarse por sexista", explica la licenciada en Letras
y profesora de Lingüística en la Universidad del Salvador Nuria Gómez
Belart. y agrega: "La realidad es que en los últimos años, hemos
tenido tantos intentos de modificar el lenguaje que a mí me cuesta no ver a
éste como uno más", analiza.
"Yo creo que es difícil que esto se sostenga en
tanto no tiene que ver con un sentimiento, sino con un fundamento político y
una declaración de principios: dos cosas que cuesta más que se sostengan en el
tiempo, sobre todo, en grupos de adolescentes", explica.
Gómez
Belart entiende la necesidad de buscar un lenguaje más inclusivo que contemple
a una nueva realidad más compleja. "Si me preguntan, lo que mejor soluciona el problema –por
lo menos en este momento– es
reformular las oraciones evitando el género", opina.
"Yo prefiero decir 'quienes trabajan'
que hablar de 'los trabajadores y las trabajadoras' o 'les trabajadores', porque siento que es lo más inclusivo. Excluir a quien es
más conservador, que seguramente va a rechazar este modo de hablar, es igual de
poco inclusivo que usar un masculino plural", reflexiona.
Entre
reacciones y aceptación, el tiempo tendrá la última palabra.
Textos:
Lucía Benegas (lbenegas@atlantida.com.ar)
https://www.infobae.com/parati/news/2018/06/29/lenguaje-inclusivo-un-nuevo-genero-o-moda-pasajera/
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